Alba Fandiño

Hace unos meses, viendo una película ya olvidada de Gonzalo Suárez, descubrí una casona antigua con un extraño laberinto en su jardín. Teniendo en cuenta los paisajes y que el director es asturiano, supuse que ese lugar no estaría muy lejos, y no me equivocaba. Investigando un poco descubrí que se trababa del pazo de Tor, un edificio del siglo XVIII situado en la provincia de Lugo, muy cerca de Monforte de Lemos. Y precisamente allí estaba a punto de celebrarse una exposición con muchos nombres que me resultaban familiares, sobre todo uno, el de Alba Fandiño.

41 metros gélidos pensando sobre Mark Rothko, 2012. Técnica mixta sobre bastidor de madera. 41 X 41

El nombre de la exposición era Como na Casa. Relatos sobre o fogar expandido, un proyecto comisariado por Chus Martínez Domínguez donde diferentes artistas muestran obras que dialogan con cada una de las estancias del pazo. Dos de las obras presentadas por Alba fueron 41 metros tórridos y 41 metros gélidos pensando sobre Mark Rothko. Pequeñas piezas confeccionadas sobre tul, en las que la artista toma como punto referencia dos obras emblemáticas del autor. Estos lienzos intentan establecer un diálogo conceptual de la práctica pictórica en grandes formatos, lo que se denominaría "pintura color field" y la inversión del tiempo que es necesario para hacerlo, revisando algunos de los pilares fundamentales de la abstracción.

Por otro lado, Alba Fandiño ha sido la comisaria de ArtePaz_A voz dos artistas, una exposición itinerante que ha estado ya en ABanca Obra Social de Santiago de Compostela y a partir de la cual se han realizado talleres y mesas redondas. Hace unos días pude conversar con Alba sobre todos estos proyectos y su trayectoria como artista, además de algunos de los entresijos que rodean el mundo del arte, la gestión cultural y las galerías.

+ Hay artistas que hacen más hincapié en la investigación previa a un nuevo proyecto, otros son más intuitivos y prefieren trabajar desde el material, experimentando con él ¿Cómo enfrentas tu proceso creativo?

Creo que todo va de la mano. Durante el proceso creativo siempre hay una parte intuitiva importante, pero esta tiene que complementarse, enriquecerse, pausarse y sintetizarse con la investigación. Allí es donde puedes observar el trabajo de otros artistas, libros de referencia, ensayos, etc. Considero que debe existir una confrontación, sino no tiene sentido, ese instinto se ve mermado.

También, una parte del desarrollo de un trabajo de investigación es plenamente intuitivo. La intuición es aquel lugar que te conduce, por un lado, a pequeños hallazgos, a relaciones, a posibles nuevas vías, pero por otro, a errores inevitables pero necesarios; se abren posibles caminos de interrelaciones y probables soluciones, por ello hay que medirla y ser cautelosos, ya que es un arma de doble filo.

41 metros tórridos pensando sobre Mark Rothko, 2012. Técnica mixta sobre bastidor de madera. 41 X 41

+ ¿Hasta qué punto puede influir la opinión de otros a la hora de crear? ¿Cuál es el mejor consejo que te han dado?

En general, no me dejo llevar por las opiniones de otros, a veces escucho consejos sobre materiales, pero no es algo que me influya de manera decisiva. Puede que en este aspecto semeje por momentos un roble del país muy cabezota. Cuando me han planteado realizar una pieza o un conjunto de ellas con un formato, unos materiales o técnicas concretas, como puede hacer una galería en determinadas ocasiones, siempre he encontrado la manera de llevarlo a mi terreno.

Tal vez el mejor consejo que me han dado es “valora tu trabajo”. Cuando tú no lo haces es más difícil que otro lo haga.

Ay Dolores, Lolita, Lola, 2007. Instalación, piezas de un conjunto de 8.

+ ¿Puedes hacernos un resumen de tu trayectoria desde que te licenciaste? ¿Qué experiencias destacas?

He estado en diferentes partes de la península con becas de pintura, he hecho un máster en obra gráfica, otro en profesorado y me he especializado en diseño gráfico, algo que me ha aclarado mucho la perspectiva de cómo tratar los aspectos técnicos de las imágenes. He trabajado con varias galerías y también he estado en ferias de arte.

Una de las experiencias que más valoro es el trabajo con el grupo de investigación, creo que es muy enriquecedor, necesario y positivo el trabajar en colectivo. Destacaría, además, la beca de competencias investigadoras de la Fundación Barrié; un encuentro importante con una organización formidable, en donde doctorandos de toda Galicia y del extranjero provenientes de diferentes áreas de conocimiento, se enfrentan a la resolución de problemas reales en un tiempo muy, muy limitado y en grupo, todo ello en habla inglesa. Es muy enriquecedor encontrarte con personas que trabajan en otras materias, que tienen diferentes puntos de vista y ver cómo confluyen a la hora de enfrentarte a resolver una problemática compleja.

Además, una de las últimas exposiciones en las que he participado en el Pazo de Tor, en Monforte de Lemos. El Pazo es un lugar espectacular y el montaje de la exposición es uno de los mejores que he visto. La manera en que las piezas han dialogado con los espacios, en habitaciones plagadas de muebles, era algo muy difícil de lograr. Las cartas de la escritora Anxos Sumai sumaban nuevas lecturas que enriquecían cada pieza y el conjunto.

+ ¿Cuál crees que ha sido tu mayor logro hasta la fecha?

Seguir el consejo de aquellas personas que realmente valoran lo que hago y que en momentos difíciles te ayudan o te prestan su experiencia para enfrentarse a situaciones complicadas y delicadas. Y, por supuesto, intentar aprender de los errores.

Los bigotes de Rapunzel, 2012. Técnica mixta sobre papel Guarro Super Alfa. 70 x 50

+ Has participado en proyectos de voluntariado trabajando con presos y personas con enfermedades mentales ¿Cómo han sido esas experiencias? ¿Qué te han aportado a la hora de enfrentarte a tu propio trabajo artístico?

He colaborado con equipos educativos y de psicólogos muy serios y muy formados, abiertos tanto hacia el arte contemporáneo como a la creatividad. Estos los he podido conocer a través del proyecto de Voluntariado denominado “PasoArte”, coordinado por Loreto Blanco. He planteado pequeños proyectos en formato de talleres que he podido desarrollar con libertad. Son colectivos donde la creatividad se valora, incluso por encima del de otros sectores o agentes más directamente relacionados con el arte. Trabajan muy bien en cuestión organización de talleres, su grado de dedicación y compromiso del personal es muy fuerte. Ha sido muy gratificante, recibes mucho de las personas. Por momentos, te planteas si tiene sentido lo que estás haciendo y si va a repercutir de algún modo, y al final ves que sí lo hace. El apoyo del personal del centro es muy importante, lo que ayuda y agiliza mucho en el momento de realizar una actividad.

¿Sabes quen son? Muestra colaborativa con la participación de usuarios de los centros DOA e APAMP

+ Pocos estudiantes de Bellas Artes se plantean la gestión cultural como una opción laboral, al menos en un principio, sin embargo muchos artistas han comisariado exposiciones ¿Qué puedes contarnos de tu último proyecto como comisaria? ¿Cómo ha sido el proceso?

Se trata de mi primer proyecto de comisariado, aunque siempre he estado colaborando con artistas, fundamentalmente jóvenes, a la hora de realizar y organizar alguna muestra. “ArtePaz_A voz dos artistas” se ha realizado en muy poco tiempo, por lo que ha requerido un gran esfuerzo y hemos intentado hacer todo lo posible para que la muestra tenga calidad y visibilidad.Al comienzo, a la hora de elaborar el proyecto de comisariado, se ha presentado la problemática de una serie de obras que ya están previamente incluidas en la muestra, puesto que habían sido cedidas o en algunos caso donadas con anterioridad a la organización no gubernamental con el fin de recaudar fondos. A partir de ahí, se ha intentado unir y reorganizar las piezas con un nuevo planteamiento expositivo para hilar todas ellas, al tiempo, que ofrecer al espectador un punto de vista más fresco, atractivo y sólido al conjunto; siempre teniendo en cuenta la consideración de la práctica artística desde una perspectiva e implicación social. Por ello, estaba muy presente que se deberían de llevar a cabo mesas redondas o talleres, en los cuales los artistas tuviesen un lugar de encuentro con el “otro”.A partir de este punto, contacté con los estudiantes por medio de los coordinadores de los diferentes programas de la facultad, los dos másteres y el doctorado, y poco a poco se fue formando un pequeño grupo. Conseguimos firmar un convenio de colaboración de prácticas externas con un alumno de Máster que está trabajado conmigo durante este tiempo, Julio Álvarez Bautista. Establecimos una serie de reuniones para revisar el planteamiento expositivo, adaptar trabajos que ellos habían realizado, o proponer obra nueva en el mejor de los casos. Y ellos así lo han llevado a cabo.

La parte más complicada se presenta durante este proceso, a la hora mediar entre los colaboradores y la organización, ya que hay un cierto desconocimiento sobre el ámbito artístico. El organizador de la exposición itinerante es la ONG “Seminario Galego de Educación para a Paz” y han sido cuatro las entidades colaboradoras en la muestra de Santiago de Compostela. Son muchos implicados con diferentes perspectivas en torno al arte. Ahí, que la colaboración con la Facultad y ABanca Obra Social haya sido fundamental.

Ha sido difícil, un trabajo arduo con muchas llamadas, mails, sesiones de skype … pero una buena experiencia a pesar del desgaste. Trabajar al lado de los artistas, escucharlos, dialogar con ellos, adaptar sus propuestas al espacio ha sido lo que más enriquecedor de esto.

Imágenes cortesía de Alba Fandiño

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